Teresita Rodríguez
Con la finalidad de contribuir a la conservación de la vida silvestre, se conmemoró este día en Acuario Mazatlán con el inicio de actividades tendientes a compartir conocimientos y crear consciencia en la población del respeto de la biodiversidad de su entorno.
Durante años Acuario Mazatlán ha sido el único receptor de especies silvestres que han sido donadas en sus instalaciones por propietarios o porque se les encontró en malas condiciones de salud, tales han sido casos de venados, tortugas, iguanas, aves diversas, coyotes, víboras, tigrillos y hasta un tigre de bengala, que fueron puestos bajo su resguardo, cuidado y tutela hasta su liberación o canalización a otras instituciones cuando no pudieron ser devueltos a la vida silvestre.
Acuario Mazatlán ha recibido también delfines heridos, lobos marinos y tiene uno de los programas más exitosos de protección de la tortuga marina, mismo que cuidó su preservación antes de que se decretara una veda nacional.
Por esos motivos, y con el propósito de crear consciencia, Acuario Mazatlán, así como autoridades municipales y de centros de estudios marinos llevarán a cabo del 3 al 6 de marzo una semana de actividades con motivo al Día Mundial de la Vida Silvestre, que incluye mesas redondas y conferencias que serán gratuitas para el público con temas relacionados a los campamentos tortugueros, varamientos de lobos marinos y cetáceos, rehabilitación de cría de delfín y cuidados de aves en cautiverio.
El director de Acuario Mazatlán, Pablo Gerardo Rojas Zepeda, destacó la atinada intervención en el caso de lobos marinos, que al ser rescatados y rehabilitados de condiciones poco favorables en su hábitat se han incorporado y adaptado a la vida en cautiverio, siendo participes incluso de espectáculos únicos en el país dados los cuidados y destreza de sus entrenadores.
La directora de ecología municipal, Lourdes San Juan Gallardo, manifestó que hay mucho que hacer con respecto al cuidado de la vida silvestre, porque hay leyes y dependencias de gobierno, pero hace falta cultura y consciencia de parte de la población en general para el cuidado de la flora y fauna que la rodea.