GILBERTO GALINDO MI GRAN COMPAÑERO DE “PERIFERIA”

82188586_2895552417175271_2007887555793518592_n
Sinmurosnews
GILBERTO GALINDO RENTERÍA  ( foto facebook de Oscar Ojeda)

 

Adriana Carlos

Apenas este lunes me enteré de la partida de Gilberto Galindo Rentería  “Galindo” como le decía a mi querido y leal compañero fotógrafo en Noroeste  en 1988 y parte de 1989, desde mis inicios como periodista recorríamos diariamente las colonias en Culiacán para publicar el acontecer en la sección “Periferia”. Cada mañana nos íbamos en su camioneta, en cualquier unidad que se tuviera a la mano en busca del testimonio de la gente de las colonias, su sentir, no nos importaban las condiciones del tiempo, ni del lugar, varias fueron las ocasiones que llegamos enlodados, empapados por la lluvia a la redacción, fuimos correteados por perros, nos apedrearon la camioneta, una vez casi nos querían linchar  por andar opinando en una discusión de colonos,  hasta se partió la unidad cuando caímos en un camino rocoso, una especie de pequeño barranco.
Sí renegaba pero en unos cuantos minutos  le regresaba el buen humor  y decía “son gajes del oficio” y se reía, siempre me animaba a no temer a la vida, así conocimos muchas historias, la creación de nuevas colonias, de microempresas familiares, evidenciábamos algunas tortillerías que vendían kilos de 900 gramos, tantas cosas, me dio ánimo cuando dos balazos entraron por la ventana de la casa hasta mí cuarto, nunca supimos el motivo.

Atrabancado, alegre, muy platicador pero sobre todo desprendido, así era “Galindo”. Fuimos un equipo de trabajo, una buena mancuerna, nunca dejaba de recordar con orgullo su terruño natal el municipio de Concordia y platicar de su niñez, de sus anécdotas y yo platicarle las mías.

No había obstáculos para él, quizá desparpajado para conseguir las gráficas pero siempre entusiasta. Constantemente pasaba por mí para empezar a trabajar más temprano, nos íbamos a los tacos, a las tortas donde nos agarraba el hambre para desayunar y continuar con la reporteada.

Hace más de 30 años me llevó a conocer su casa, han pasado tantos años no sé si alguien de su familia me recuerde. A  finales de 1989 nuestros caminos se separaron, me fui a radicar a la Ciudad de México como corresponsal del periódico por algunos años, a Mazatlán, fueron pocas ocasiones que tuve la oportunidad de verlo en persona cuando iba a Culiacán, pero así pasaran los años siempre nos saludamos con mucho cariño, donde quiera que esté sabe que fue mi gran compañero fotógrafo y amigo al que llevaré en mi corazón. Mis condolencias para su familia. Descansa en paz “Galindo”.

Translate »